sábado, 23 de junio de 2007

Al cine claro que quisiera ir al cine con vos claro que quisiera decir tu nombre cien veces pero no es necesario nombrar al amor, si pudiera volver a creerte si pudiera pensar en un desayuno juntos con tazas de cerámica con una casita grabada una casita con tejas rojas una tranca adelante que sólo abriríamos de vez en cuando a los amigos y con árboles frutales florecidos y con florcitas en el jardín de entrada ¿sabés? tomaríamos allí en esas tazas con casitas como nuestra casita el café con leche todas las mañanas y después vos me traerías un jugo de frutas y una flor y yo te daría un beso y te abrazaría fuerte y te transmitiría mi fuego todo mi fuego que también es tu fuego y nos abrasaríamos hasta consumirnos en esta pasión de la vida compartida por qué volviste con alguien por qué siempre anduviste a la caza de otros a la búsqueda de un hogar y dejamos escapar nuestra oportunidad la oportunidad de llegar hasta el fondo de todo más todavía de lo que habíamos llegado podíamos haber inventado un canto para aparearnos una llamada de amor y nos cuidaríamos mutuamente y después cuando todos estos años que pasamos separados los hubiéramos pasado juntos tal vez fuéramos distintos y encontraríamos la culminación de la pasión qué poco me parece un cine para ver otra película no la nuestra esta que yo quisiera saber qué fue de tus pensamientos en todos estos días en todos estos meses en todos estos años no quiero ser celosa pero hubiese querido acapararte para mí con todos los días de lluvia y de sol en todas las plazas los cafés en una casa nuestra en tantos veranos e inviernos para que me dieras frío o calor dónde estuviste todos estos años que no estuviste conmigo dónde estuviste cuando me enamoré cuando huías de mi recuerdo cuando me dejaste el campo libre para enredarme en su voz y seducirme en sus ojos verdes con quiénes y dónde por qué no me buscaste.